La Denominación de Origen Bullas tuvo la oportunidad ayer de participar en la formación del Ciclo Formativo “Servicios en la Restauración” impartido en la Escuela de Hostelería de Lorca, del Instituto de Educación Secundaria San Juan Bosco, ubicado en esta localidad. En este ciclo de formación profesional participan estudiantes de entre 18 y 20 años de edad, que son cualificados como futuros profesionales de la hostelería.

La participación de la DO Bullas en esta formación se llevó a cabo en coordinación con Carlos Ortega, Profesor Técnico de Servicios en la Escuela de Hostelería. Carlos Ortega, que tiene amplia experiencia en el mundo de la hostelería y conoce bien la Denominación de Origen Bullas, explicó al Consejo Regulador la necesidad de incorporar estas píldoras formativas con el fin de que los alumnos conozcan los productos regionales. Él mismo considera que los estudiantes de esta formación serán los principales defensores de los productos y el conocimiento de éstos es imprescindible para ello, visión que es plenamente compartida desde la DO Bullas.

Siguiendo la dinámica de la Denominación de Origen, se organizó una sesión formativa sobre la D.O. Bullas y una cata con vinos cortesía de tres bodegas de la DOP Bullas. La formación fue impartida por el sumiller José Sánchez Alcaraz, gran conocedor de nuestra Denominación de Origen y sus vinos. El sumiller realizó una cata introductoria para iniciar a los estudiantes en los diferentes aspectos de la cata y sus fases, la visual, olfativa y gustativa. Para la consecución de la misma se procedió a la cata de un vino blanco, dos rosados y tres tintos DO Bullas.

Cata de Vinos DOP Bullas:

• Cepas del Zorro Blanco Macabeo 2020. Bodegas San Isidro.
• Carrascalejo Rosado 2020. Bodegas Carrascalejo.
• Begastri Rosado 2020. Bodegas Carreño.
• Cepas del Zorro Monastrell 2019. Bodegas San Isidro.
• Rosmarinus Roble 2018. Bodegas Carrascalejo.
• Viña Azeniche Syrah 2019. Bodegas Carreño.

   

La cata permitió a los estudiantes conocer mejor las diferentes variedades autorizadas y las características de cada bodega. Más allá de los aspectos técnicos, el sumiller introdujo a los estudiantes en antecedentes históricos del vino y en la vinculación con el cine, la música y el arte en general. Por otro lado, como el programa formativo incluye formación en idiomas, parte de la cata se impartió en inglés con el fin de incorporar vocabulario técnico tanto de la cata como del mundo de la hostelería y la gastronomía.