La directora general de la Guardia Civil, María Gámez, y el presidente de la Conferencia Española de Consejos Reguladores Vitivinícolas (CECRV), David Palacios, firmaron ayer un protocolo general de actuación para impulsar la prevención y la lucha contra el fraude en este sector, en defensa de las denominaciones de origen y de los viticultores, bodegas y consumidores.
La Guardia Civil tiene asignadas las misiones genéricas de «protección del libre ejercicio de los derechos y libertades, garantizar la seguridad ciudadana», y la «averiguación del delito y descubrimiento y aseguramiento del delincuente», y dentro de estas competencias se encuentran la lucha contra las conductas relacionadas con la falsificación, adulteración, venta, etiquetado, comercio o distribución ilegal de productos alimenticios, que se prevén y sancionan en España tanto en el ámbito administrativo como en el orden penal.
Por otro lado los objetivos de CECRV como asociación a la que pertenece la DOP Bullas, que se encuentran relacionados con el presente procedimiento operativo de colaboración son el representar, gestionar, defender y promocionar los intereses comunes de las denominaciones de origen vitivinícolas; defender y velar por el prestigio de los vinos españoles con denominación de origen, así como contribuir a proteger los derechos de propiedad intelectual ligados a dichas figuras de calidad y promover la lucha contra el fraude en los vinos con calidad diferenciada.
Ambas partes comparten el objetivo de la protección de los derechos de los productores (viticultores), elaboradores (bodegas) y consumidores, garantizando el principio general de veracidad y justificación de la información, que figure en el etiquetado de los productos agrarios y alimentarios.